Estrés Térmico

11/05/23
En la época estival, aumenta el riesgo de que el ser humano sufra estrés térmico por calor, causado por las altas temperaturas del verano.

El estrés térmico por calor es el exceso de calor que los trabajadores reciben y está causado por distintos factores que producen acumulación de calor en el cuerpo.

Laboralmente hablando, los ambientes con más riesgo de estrés térmico por calor son aquellos en los que los empleados realizan trabajos al aire libre como la construcción y obra pública, la agricultura y ganadería, jardinería y mantenimiento urbano, etc.

Normativa sobre estrés térmico y prevención de riesgos

Además de la Ley 31/1995 de Prevención de Riesgos Laborales y del Reglamento de los Servicios de Prevención (Real Decreto 39/1997), para la prevención de los riesgos derivados del estrés térmico se aplica la normativa detallada en el Real Decreto 486/1997, de 14 de abril. En este Real Decreto se regulan y establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud en los espacios de trabajo.

Este Real Decreto, específica en el anexo III, los rangos óptimos de temperatura y de humedad en los lugares de trabajo, en función del tipo de trabajo realizado (ligero o sedentario).

Los principales grupos de riesgo

  • Las condiciones de trabajo para trabajadoras en situación de embarazo, están reguladas por una normativa específica, que desarrolla el artículo 26 de la Ley de PRL 31/1995.
  • Así, el Real Decreto 298/2009, que modifica al Real Decreto 39/1997, en su Anexo VII, incluyendo la exposición a calor extremo en la lista de agentes y condiciones de trabajo que pueden influir de manera negativa en trabajadoras embarazadas o en período de lactancia.
  • Los trabajadores altamente sensibles a ciertos riesgos se encuentran protegidos mediante el Artículo 25 de la LPRL.
  • También se establece, que, en las evaluaciones, se deben tomar en cuenta los factores que puedan producir efectos nocivos sobre la salud de las personas debido a la exposición a agentes químicos, físicos y biológicos.
  • La salud de los menores de 18 años, también cuenta con una protección y normativa específica. Los puestos de trabajo que vayan a ocupar menores, deben ser evaluados conforme al artículo 27 de la Ley 31/1995.
  • En lo relativo al calor, los menores están protegidos además por el Decreto de 26 de julio de 1957. Este decreto regula los trabajos prohibidos para los menores de edad. Por ejemplo, trabajos en hornos y aquellos en los que pueda haber riesgo de estrés térmico por exposición a temperaturas elevadas.

Para ello, lo mejor es prevenir con antelación.

La solución en estos casos, es tener un plan de prevención de riesgos laborales, con información de cómo adoptar las medidas preventivas necesarias frente a los trabajos con riesgo de estrés térmico laboral.

Si quieres evitar el estrés térmico en el trabajo, empieza a tomar medidas preventivas sencillas.

Últimas Entradas