Autor: Manuel Gutiérrez Durán. Especialista del Área de Ergonomía y Psicosociología Aplicada
El entorno laboral tiene un impacto significativo en la salud mental de las personas trabajadoras. Factores como el estrés, la carga de trabajo, los conflictos interpersonales y la falta de reconocimiento pueden desencadenar riesgos psicosociales que afectan tanto el bienestar del personal como la productividad de la empresa. Por ello, es fundamental que las organizaciones identifiquen, evalúen y gestionen estos riesgos de manera proactiva, promoviendo un entorno laboral saludable.
¿Qué son los riesgos psicosociales?
Los riesgos psicosociales son aquellas condiciones del trabajo que pueden afectar negativamente la salud mental y física de las personas que componen una empresa. Estos riesgos incluyen situaciones de estrés prolongado, acoso laboral, desequilibrio entre vida personal y trabajo, falta de control sobre las tareas, entre otros. Si no se gestionan adecuadamente, pueden derivar en problemas como ansiedad, depresión, agotamiento laboral (burnout) y disminución del rendimiento.
¿Por qué es importante evaluar estos riesgos en la empresa?
La evaluación de riesgos psicosociales permite identificar las fuentes de estrés y los factores que pueden afectar el bienestar de los empleados. Esto es clave por varias razones:
1. Prevención de enfermedades mentales: Detectar a tiempo los riesgos ayuda a prevenir trastornos relacionados con el trabajo, evitando bajas laborales y altos costos para la empresa.
2. Aumento de la productividad: Las personas empleadas que trabajan en un entorno saludable son más productivas, comprometidas y creativas.
3. Reducción del absentismo laboral: Un clima laboral positivo reduce el ausentismo por enfermedades relacionadas con el estrés.
4. Cumplimiento normativo: la evaluación de riesgos psicosociales es una obligación legal, por lo que su incumplimiento puede acarrear sanciones.
Evaluar los riesgos psicosociales y promover la salud mental en las empresas no solo es una cuestión de ética y/o cumplimiento legal, sino también de eficiencia. Las personas trabajadoras sanas, tanto física como mentalmente, son el motor de cualquier organización. Por ello, las empresas que apuesten por un entorno laboral saludable estarán invirtiendo en su propio éxito a largo plazo.